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Estación de Tren


Así que aquí voy, la corriente de aire despega junto a mis ganas de no querer detenerme nunca, la sensación de “estar vivo” nunca había estado tan presente en mi, solo basto que tú me dieras un par de palabras de aliento para que ascendiera del patético nivel de ridiculez en el que me encontraba, tú has sido aquel aporte que necesitaba y que nunca dejaré ir, porque has decidido quedarte a mi lado, has decidido mi compañía… porque has decidido mi amor. Y por eso tengo el resto de mi vida para poder demostrarte lo agradecido que siempre estaré por la decisión que tomaste, cosa que nunca pensé sucedería, pero ya me has hecho ver lo equivocado que puedo llegar a estar.

El humo comienza a dispersarse, las multitudes comienzan a aglomerarse aún más, la bocina anuncia tu llegada y yo solo quiero bajar pronto, busco tu silueta con desesperación mientras camino contra la corriente, adelante unos letreros guían mi camino, siento mi caminar un poco más ansioso, siento mis manos un poco temblorosas, me detengo, creo que debo respirar profundo y aceptar las cosas como debí haberlo hecho desde hace mucho antes, cierro mis ojos por unos segundos, los abro y vuelvo a caminar. Tengo puesto el traje que alquile, ¿lo recuerdas? Aquel con las líneas verticales, me hace ver más alto y más delgado, amas este traje.

Estas parada frente a mí ahora mismo y no puedo quitar la vista de tu hermosa sonrisa y coquetos ojos, pareciera que esperas un abrazo, pero yo soy feliz con tan solo tener la oportunidad de deslumbrarte, no sé cuanto debo aprender para poder explicar con certeza lo que siento en este momento y es por eso que decido darte el abrazo que esperabas. Tu calor invade mis arterias, siento que me da un infarto, es que no sabes lo que siento cada vez que te veo, es que no sabes lo que pasa por mi cada vez que me ves con esos parpados que parecieran cansados, es que no sabes lo mucho que cuento los segundos desde la última vez que te vi. Tú has sido una sorpresa en mi vida, tú has sido algo inesperado, no quiero perderte nunca, no quiero repetir errores de los cuales arrepentirme luego, te quiero aquí, te quiero conmigo, me siento mucho más tranquilo y feliz de decirlo cuando ahora sé que tú quieres lo mismo. Creo que debo dejarte respirar ahora, el abrazo ya lleva unos minutos, sonríes mientras ladeas tu cabeza, acaricias mi mejilla sabiendo que eso hace que mi piel se torne completamente roja, tus gestos me invitan a llevarte a casa, conduzco lento solo para poder pasar más tiempo contigo, creo que te diste cuenta, admites que no te molesta, que de hecho también ansias que viaje lento con tal de pasar tiempo conmigo. El cielo ahora está despejado, las nubes vigorosas y esponjosas nos dan el espacio para recibir los rayos de sol junto a otro destello de brisa amistosa que inunda el coche apenas bajo la ventana, juraría que vi un par de aves planeando el cielo a unos metros sobre nosotros, juraría que notaba solo rostros sonrientes por la calle que transitábamos, juraría que el trafico nunca estuvo tan despejado. Vuelvo la mirada a tus rodillas completamente visibles y seductoras gracias a tu vestido, doy otros segundos para volver a apreciar tu rostro, que rebalsa a este punto, de emoción junto a un poco de apuro, te comportas como una pequeña impaciente, adoro eso de ti, lo honesta que te dejas ser, lo libre que eres al expresar tu pensar, no lograría imaginarte sin alguna cosa menos en tu persona ya más que definida a este punto, vuelvo mirar el camino, no tiene sentido, todo está despejado y todo esta bellísimo como nunca antes lo estuvo, pareciera que dios está compartiendo conmigo la alegría inmensa de la ya remarcada felicidad, me cuentas sobre tus proyectos, te cuento sobre los míos, el futuro que nos depara juntos solo deslumbra grandeza. Creo que me cae una lágrima, te percatas de aquello, usas tu desnudo dedo para removerlo, luego le das otra caricia a mi mejilla. Aún respiro hondo, aún tengo el corazón levemente acelerado, intento relajarme mientras doblo la esquina a solo unos metros de lo que llamaremos hogar, aquello por lo que alguna vez soñamos por separado y que juntos lograremos muchos más, juntos concretando ideas, que al estar solos, nunca podríamos haber alcanzado debido a la falta de autoestima o simple animo o energía, pero al vernos por primera vez en aquella sala donde un montón de jóvenes podrían verse o juntarse con cualquier otro, notamos de inmediato que estaba en el otro lo que estábamos buscando, aquella vibra inmortal que nos mueve y revitaliza en todo momento, en esta ocasión donde estaba, destinado a ser. No sé porque lo dude por un tiempo pero llegaste a mí y todo temor se opaco por completo, toda duda quedo apartada de mi cabeza, inundaste mis pensamientos, los hiciste tuyos, los moldeaste a tu imagen y semejanza todo con una simple mirada que ahora pasa a ser una vida, como si estuviera destinado a ser, como si fuera nuestro destino encontrarnos en aquel lugar y momento exactos, para luego dar pie a lo que definiríamos como aventura, donde después de varios episodios dignos de recordar, tanto buenos como malos, ambos resurgimos junto al otro, sin reconocerlo en un principio, sin aceptarlo del todo, pero luego de que todo fuera dejado atrás, quedaron nuestras principales ideas. Eres mía y yo soy tuyo, tal y como acordamos, aceptando sutilmente nuestra utopía hecha una realidad innegable, completamente real, ciertamente incuestionable, donde solo debemos seguir con lo que nos mueve y nunca detenernos, ni ante nada, ni ate nadie que no se trate de alguno de nosotros, me conoces, te conozco, claramente no pedimos más que eso, porque nada más nos falta para complementar nuestra gracia vitalidad… bueno solo una cosa, pero ya trabajaremos en aquello. Es que no puedo ser tan afortunado, simplemente tardare un tiempo en acostumbrarme, pero estoy seguro que ya somos más que simples amantes afrontado la vida, ahora, de la mano.

Phase 2

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