TDV Antofagasta 2017 #10
Día 5
Se suponía debía levantarme mínimo a las seis con quince minutos, yo me desperté a las cinco con treinta y cinco, pensé en bajar de inmediato a cocina, ya que el Dilan decía que entre más temprano mejor, pero luego me dije que quizá no tanto.
Cerré los ojos por unos momentos hasta una hora un poco más prudente, en eso siento que me tocan el brazo, era otra niña de la cuadrilla de intendencia de hoy al igual que yo, creo que es alemana. Veo la hora, seis con quince minutos.
Despego de la cama sorprendido ¿En qué momento pasaron tantos minutos, si apenas cerré mis ojos? No importa ahora.
Bajo rápidamente a lavarme los dientes y la cara, llego a casino, mientras esperábamos a un niño más, comenzábamos a cortar los panes, en eso llega el faltante y nos preparamos para despertar a los demás. A lo único que atino es tomar una pala como intento de guitarra. Entramos en la primera sala y comienza la música, el Pablo se había puesto un chaleco como intento de pelo largo, parecía más musulmán que rockero. Mientras unos hacían movimientos un poco exagerados yo solo me encargaba de menear una polera en el rostro de algunos, esperando que se despertaran solos y no llegar a hacerlo. Al salir de la primera pieza noto que el gato está sentado en la puerta, vamos a la segunda pieza, misma rutina y al salir el gato está sentado en la puerta, aquí es donde despierto a la Darling quien dormía junto a la Dijana, ambas mirándome recostadas, la Darling me daba unas pequeñas palabras sobre el despertar, yo en recompensa le lanzo un chupete que dieron en aquella actividad que como había mencionado siendo la única cuadrilla que no gano, olvide agregar que de todas formas terminaron repartiendo chupetes para todos (tenían de sobra). Ultima pieza y el gato como mayordomo nos esperaba a la salida, luego de eso volvimos a cocina y seguimos partiendo panes, hay atún y por suerte queda mayonesa, al menos medio paquete. Terminamos de servir, ahora podemos tomar nuestro té. [PARTE ELIMINADA].
Bueno, después del desayuno subí a seguir escribiendo hasta la actividad de envío, tuvimos que volver a realizar un segundo sketch, más simple esta vez, que involucraba alguna situación graciosa de cada cuadrilla. [PARTE ELIMINADA]. Resulta que estaba haciendo una muñequera con esas tiras de lana, con temática de las tortugas ninja, era para regalo y no pregunté más, porque tampoco quería bombardear con preguntas, aunque creo que ¿se supone? Ya no tengo ni puta idea. Le estaba quedando súper bien según veía, [PARTE ELIMINADO], ahora va a comenzar el calentamiento de la mañana y está dirigido por el Juan (soldado), nos acumulamos en la salida y partimos, levanto un chuzo y subo, ojala hoy avancemos mucho.
Quince minutos pasan de las diez de la mañana, llegamos al campamento.
Las horas parecen concluir mucho más rápido conforme pasan los días, ya nos han vuelto a llamar a descanso y siento que solo han pasado cinco minutos desde la última vez.
[PARTE ELIMINADA].
Pasando a otro punto, nos han llamado a almorzar, tenemos el gusto de ir donde la señorita María por segunda vez, una de las tres que asistió anoche a la actividad. Esperamos como media hora porque estaba estudiando según nos dijo, obviamente se comprende, ella comenzó a cocinar las chicas se ofrecieron a ayudar. Dormí un poco, no sé cuánto, como a los diez minutos después de despertar se comienza a sentir olor a comida, luego de otros cinco llegan los platos.
Arroz amarillo con verduras, trozos de vienesa y mayonesa a gusto. Delicioso, tanto así que cuando nos dio la oportunidad de repetirnos, nadie lo dudo.
Al terminar ya era hora de volver y no alcanzamos a reposar ese almuerzo recién digerido ¡dos veces!
Ya habían dos cuadrillas bajo el toldo esperando, faltaban dos.
Llegaron y después de unos minutos volvimos a trabajar, no fue la gran cosa ni nada nuevo, [PARTE ELIMINADA] es que trabaje para mi cuadrilla unas horas y el resto del día en otra, use el chuzo sobre tierra que tenía una capa de piedras tan amplia que me hice trizas las manos, más aún cuando me quite los guantes para prestárselos a la Dijana, [PARTE ELIMINADA].
Faltan veinte y cinco minutos para las ocho y hoy baje unas palas y ayude a las tres personas que bajaban con las carretillas en los peldaños cuando llegaban a la escalera de entrada.
Durante la tarde de trabajo hable con la Darling y le dije que le cobraría la palabra, ella pregunto —¿cuál? —, yo respondo —la de discutir —, ella rio y le dije que otro día porque en ese momento estaba más cansado que la chucha.
[PARTE ELIMINADA], me da risa y vuelvo a relajarme. Otra cosa que me da risa [PARTE LIMINADA], solo estaba sentado en todo momento escribiendo en el celular, lo único que hacía con casi todos ¡casi todos!, exceptuando a la Darling (porque le gusta hablar y siempre tiene algo que decir con la mayoría de personas, eso pude notarlo. Tiene esa mirada y acercamiento que cuando te habla es imposible no sonreír o responder), [PARTE ELIMINADA].
Ella mencionaba que yo tengo algo, que cuando hablan conmigo imparto esa confianza inmediata, entonces es así como intento explicar las razones, pero de alguna forma no quedo conforme, no sé por qué y eso me molesta, me disgusto conmigo mismo, creo que es algo estúpido a mi parecer.
[PARTE ELIMINADA].
Ojala tuviera datos móviles, lo intente pero no hay caso, [PARTE ELIMINADA], porque aquí nos hacen calentar todas las mañanas antes de subir y en las tardes antes de bajar.
[PARTE ELIMINADA]
Pocos minutos sobre las ocho de la noche, iré a bañarme.
Cuando salí de la ducha, escuche al Dilan gritar —¡EN CINCO MINUTOS SE CIERRA LA COCINA! —, no quería perder mi cena por lo que decidí esto: Me seco, me visto y voy a cenar.
Calculé que no alcanzaba a subir, dejar la ropa en la pieza y volver a bajar, además andaban más estrictos en cuanto a los horarios, la ropa y toalla quedaron tiradas en las bancas de las duchas, no me preocupe mucho al respecto ya que desde la primera vez que nos bañamos quedaron prendas de vestir tal cual las dejaron.
Alcancé la cena.
Fideos con salsa blanca y de postre arroz con leche con una frutilla encima, estaba tan al borde del pocillo que cualquier inclinación de la bandeja haría derramar su contenido y no quería desperdiciar nada. La cena la estaba entregando la Rocío, quien como costumbre para todos da el saludo de cortesía y pregunta “¿qué tal tu día?” Como ya mencione, para mi es la ternura personificada. Al darme mi bandeja me habla sobre el postre diciéndome que debe agregarle manjar líquido.
—A ti te voy a poner dos cucharadas de manjar, porque…… porque si —, rie.
—Sin ningún motivo en especial, eso me gusta —, respondo. Agradezco, doy media vuelta y retiro a comer. Camine, como quien camina por la cuerda floja, buscando algún asiento libre. Ambas caras de la "U" estaban llenas y solo había espacio en la base, ese lugar donde solo entra una silla, ideal para enajenados como yo, en eso el Ignacio me llama, estaba en una de las filas casi en la base y me invita a sentarme a su lado, justo al final de la fila, tocaba la mesa que conformaba la base de la letra “U” con mis costillas, aún así disfrute la comida, el postre y jugo. Termino y voy a lavar la loza, en la fila me vuelvo a cruzar con la Rocío, quien me pide la opinión de la cena e invita a servirme más si quiero. Preferí no hacerlo, le agradecí, ya estaba en fila y estaba satisfecho, tarde un poco, pero lave las cosas, subí la escalera y no me encontré con el gato quien estará en sus propios asuntos.
Me siento a escribir, tengo pensado proponerle a la Rocío terminar de explicarle el punto que quedo inconcluso después de la actividad, veré que tal anda.
[PARTE ELIMINADA].