TDV Antofagasta 2017 #13

Minutos después la veo trabajando [PARTE ELIMINADA], nos divisamos y acercamos, ella me cuenta la razones, malestar estomacal, había vomitado, pero ahora me decía que se sentía mejor. Como ya se había hecho costumbre nos preguntamos lo que almorzamos, yo le saco pica de mi almuerzo y ella pone esa cara de sorpresa envidiosa que disfruto.

Durante la tarde conversamos otro poco y ella habla sobre un pequeño niño del campamento como su hijo y la cosa es que iba en serio, me contó que comenzará las gestiones para apadrinar al pequeño, al menos se pondrá manos a la obra cuando terminen los trabajos, espero pueda concretar aquello.

Por la tarde teníamos que hacer un hexágono en la tierra, interpretando cada vértice con un agujero de treinta centímetros de radio y sesenta centímetros de profundidad, hubo un instante donde estábamos cada uno de nosotros de estomago en la tierra y con un brazo completo en un agujero.

—Todos los weones de guata en el suelo —mencione al notar nuestras posiciones.

La risa comenzó sobre todos, en especial en la Anaïs. Costo un mundo lograr la meta hasta que nos dimos cuenta de un pequeño problema, los agujeros estaban algo desnivelados no en cuanto a un hexágono deforme, porque quedo más que perfecto, sino más bien es que se encontraba con sus caras rotadas. Luego de una larga discusión con los capataces y jefes de escuela, ejemplos sobre lo que sucedería si lo dejamos así, es que llego la respuesta de parte de un capataz —pero si las otras tablas que conforman el juego de las barras se clavan arriba no al costado así que no importa en dirección este mirando —.

—¡¡Yaaa…!! Por allí hubieras comenzado —respondimos y reíamos un poco acerca de las cosas que nos carneábamos, cuando en realidad no importaba hacia qué lado estaba mirando la figura. Ahora bajamos al colegio con varias cosas listas y preparadas para el próximo día, penúltimo para ser exactos, mañana se espera llegar a armar todo, eso podría ser un cacho, porque todo debe salir perfecto, pero ya tenemos práctica con las barreras que pusimos. Calentamos el cuerpo, ya que no lo hicimos en el campamento antes de bajar, hice lo que había pensado antes ¿Qué tal si esta vez me baño primero y luego me pongo a escribir tranquilo? Costumbre era todos los días al llegar, ponerme a escribir con la ropa de trabajo, toda sucia, hedionda, sudada, que al momento de que anuncian la cena es cuando recién voy a bañarme, de este modo cuando vaya iré de los últimos y no tendré que esperar, lo malo es que podía perder la cena o comer lo raspado y/o helado.

Hoy pude sentarme de los primeros para la cena, sorprendieron con arroz junto con una mezcla de tomate con huevo, estaba malditamente delicioso y además recién cocinado, [PARTE ELIMINADA] cuanto lo disfrute. Me siento cerca de la base y en eso, se sienta el Pablo a mi derecha, seguido se la Darling frente a mi (quien de hecho había llegado primera y se había sentado a mi izquierda, pero luego inmediatamente decidió cambiarse), con su amiga a su derecha, luego se une el Juan a mi izquierda y por último la Rocío, a la izquierda de la Darling, y el Dilan, a la izquierda de la Rocio. Esta chiquilla de la Darling se encontraba súper feliz y animosa durante la cena y después, como ya casi siempre, pero esta parecía ser un poco extra. Comienza de nuevo las bromas de "darme la pasada" y todo eso, agitando la cabeza de vez en cuando con pequeños meneos, asimilando una danza mientras estaba sentada y esas cosas, muy divertidos.

Las caras que pone la Darling con esa mirada fija y coqueta sobre el hombro mientras dice —así conquisto —, son momentos en los que no paro de reír, ella mirándome fijamente con una sonrisa de niña buena/mala. Observo a los demás, el Juan se retira sin antes decirme —cualquier cosa Andrés avisa nomas, toca el botón de pánico.

Ellos también están en su salsa riendo con las cosas, observo a la Rocío con rostro de "hay por dios esta chiquilla" riendo simplemente. Hubo otro par de momentos que me dio gracia, cuando la Rocío se percata de que el Dilan no vuelve después de pararse por una urgencia —­¿y este culiao no piensa venir a almorzar? —, expresa con su voz de niña chica, nuevamente me lanzo a reír, luego salta con otra frase cuando revisa su estuche.

—¡Puta, pero quien me saca mis weas! —, nuevamente mi risa brota sin control, además de que esta la pronuncia con su voz más grave, muy tierna, insisto. Ella pregunta de qué me río.

—De ti —respondo.

Minutos después la Darling se levanta —¿vamos? —, me dice.

—Ok, vamos —, respondo de inmediato, "mandoneado" escucho por allí ¿razón? quería proponerle tener la discusión hoy, si es que anda con ganas.

—Si por supuesto, ningún problema —replica.

La actividad.

Grupos al azar, información administrada sobre injusticias y derechos que no han sido cumplidos, el objetivo es aprender la forma en que se mueven los servicios del ministerio y aprovechar cada tipo de institución y obviamente conocerla.

Un cacho. Durante la escritura de una respuesta que después debían ser expuestas, recordaba las palabras del Sebastián, el geólogo.

—¡Que wea hago yo aquí hablando de política, yo solo sé de enfermedades!

Luego de que los demás tomaran una decisión, llego el momento se exponerla, menos mal que solo pedían dos voluntarios por cuadrilla.

Termina la actividad y subo por mi pasta de dientes y cepillo, bajo al baño, vuelvo y ordeno mis cosas, me siento afuera de la pieza escribiendo, me queda poca batería, en eso llega la Darling junto al Nicolás y su amiga Katherine que conoció recién aquí (creo que ya lo mencione), me pregunta si estoy ocupado, entonces entro a dejar cargando mi celular, salgo y ella se encuentra sola, mientras sus compañeros se están alejando, me siento a su lado, fuera de la pieza, hay muchas sillas en las que acomodarse. La premisa de la discusión más que nada, era saber el porqué no decidió participar en la actividad donde nos vendaron, lo mejor era que ya sabía su respuesta porque yo pensaba lo mismo, pero aun así quería escucharlo de su boca, que luego me puso más satisfecho aún cuando la respuesta era exactamente la que ya había pensado, luego de unos minutos conversando y viendo que la cosa ya lleva por palabras un poco mas privadas, es que ella pide sentarse más lejos, de esta forma evita oídos ajenos indeseados.

Conversamos bastante y ya vendría siendo la tipo de mujer que imaginaba, ya explique por qué. Después de varias anécdotas, vemos de pronto al Nicolas junto a la Katherine, la Rocío y Dilan a sentarse a nuestro costado.

—Cabros que desubicados, ahora aprovechen y toquen el violín —dice la Darling en tono de un falso desconcierto, se quedaron por unos minutos, luego se fueron. Con la Darling continuamos nuestra conversa que de a poco ganaba tono filosófico donde concordamos en varias ideas, no todas, pero la gran mayoría. Volvió a pasarme nuevamente, [PARTE LIMINADA], de hecho esa fue una de las cosas que olvide preguntar, de hecho, hubo un par de cosas que olvide preguntarle por estar atento a su contextualización de las cosas, veré si las puedo continuar mañana durante el día o noche, aún no lo decido, lo anotare por allí para que no se me olvide.

Nos fuimos a acostar, no mentira, ella tenía que lavarse los dientes, la acompañe.

Nos fuimos a acostar, no mentira, se le habían quedado sus zapatos de trabajo en las duchas, la acompañe.

Nos fuimos a acostar, no mentira, bueno en parte es verdad, ella se acostó y yo solo entré a buscar mi celular, que ya se encontraba cargado al cien por ciento, a seguir escribiendo, al rato una niña sale rápidamente de la pieza cubriéndose la boca y detrás la Darling quien la alcanza hasta la puerta —se siente muy mal, tiene ganas de vomitar —menciona. Al rato buscó al Dilan para darle algo a la niña, en eso pasan los minutos y se vuelve a ir a acostar, yo sigo escribiendo, ya casi pasan las tres de la mañana el sueño comienza a reclamar territorio, hasta el punto de quedarme dormido sentado afuera con el celular en la mano —ok, creo que ya es hora de acostarse —repaso en mi mente.

Ni siquiera escribí "buenas noches" o mencione la hora que fui a acostarme, porque estas últimas líneas las he escrito ahora en la mañana, pero hagamos de cuenta que las escribí anoche ¿de acuerdo?, ok entonces, son cerca de las tres y media de la mañana y me voy a acostar, cuando entro a la habitación veo que la Darling está concentrada en su celular.

—¡Oye tu, duérmete! —menciono con voz baja.

—Si, en un ratito mas —respondió y siguió con la luz en su rostro, yo entro en mi saco de dormir y pareciera que apenas apoyo mi cabeza, caigo exhausto.